Educación en República Dominicana

Vivimos en tiempos donde la educación se ve como una obligación, sin embargo desde que era una niña he considerado la educación como un privilegio, debido a que mi familia es muy humilde, y gracias al esfuerzo de mis abuelos, mis padres y hasta mi propio esfuerzo he logrado estar aquí, hoy estoy de pie, delante de ustedes, hablando del que considero el tema más importante para el desarrollo humano, su educación.

Cuando mi abuelo tenía 10 años, tenía que caminar descalzo 2km para poder llegar a la escuela, sin desayunar, y regresaba sin almorzar, para luego tener que ayudar a su padre en el conuco. Esa era su rutina, día tras día, hasta que tuvo que dejarlo porque no había suficiente dinero. Me parte el alma el pensar que él, a pesar de tanto que de sacrificaba por estudiar, anhelaba ir a la escuela a aprender, y nosotros que tenemos todas las facilidades no queremos esforzarnos por aprender, y no solo es cuestión de pasar una materia, eso es para profesionales mediocres, se trata de adquirir los conocimientos que nos servirán por el resto de nuestras vidas.

El gobierno dominicano contempla en el art 63 de la constitución el derecho a la educación:

“Artículo 63.- Derecho a la educación. Toda persona tiene derecho a una educación integral, de calidad, permanente, en igualdad de condiciones y oportunidades, sin más limitaciones que las derivadas de sus aptitudes, vocación y aspiraciones.”

¿Estamos recibiendo esta educación de calidad a la cual tenemos derecho?

Actualmente se implementa en las escuelas y colegios de basics y media la educación por competencia, donde juzgan tu desenvolvimiento durante el transcurso del año escolar completo, sin la necesidad de exámenes. Con este nuevo sistema, quedó eliminado el “memorizado”, pero a la hora de evaluar el contenido impartido en las diferentes áreas de clase nos damos cuenta de que, el gran avance no es tan grande como imaginamos, aún nos siguen vendiendo gato por liebre.

El sistema de estudio Dominicano ha permanecido estructuralmente igual desde que mis abuelos asistían a la escuela, se juzgaba la memorización disfrazada de aprendizaje mediante exámenes que definen tu rendimiento y ayudaban al docente a asignarte una calificación de la cual dependería si pasas o no al siguiente grado.

La educación es única vía para alcanzar el desarrollo integral y humano. Con una sociedad educada elegiremos mejores gobernantes y funcionarios capaces.

Estamos en un tiempo diferente, la educación dominicana debería adaptarse a la enseñanza de temas que nos formen como personas, y nos prepare para la vida misma.

Termino mi discurso con una frase que hace mucho escuche: “No vale de nada darte educación a los pobres si les das una pobre educación”